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Ya es oficial: SearchGPT será el buscador con el que los de Sam Altman competirán con Perplexity y Google. En mayo se dieron a conocer una serie de rumores sobre este proyecto de OpenAI, al publicarse el registro de un nuevo dominio: search.chatgpt.com. Ahora, el prototipo estará disponible para un reducido grupo de usuarios y el resto pueden apuntarse a la lista de espera.

De momento, el buscador será capaz de responder a preguntas concretas recomendando algunas páginas web relacionadas con el contenido buscado. Además, el buscador incorporará enlaces a algunos medios de comunicación para ofrecer contenido de actualidad en tiempo real, una asignatura todavía pendiente en ChatGPT. Ahora tienen más sentido los diferentes acuerdos a los que han llegado con diferentes proveedores de noticias.

El buscador también será capaz de ofrecer gráficos, imágenes e información de servicio, como la previsión meteorológica. Hasta aquí no hay grandes novedades respecto a otras alternativas de la competencia.

Este servicio también será, según explican desde la compañía, un banco de pruebas para incorporar algunas de las mejores características en su producto principal, ChatGPT. La idea es ofrecer una experiencia de búsqueda nueva que podría progresivamente ir sustituyendo a Google si demuestra ser más eficaz, útil e intuitiva. En el otro extremo, Perplexity, que levantó hace unos meses una ronda de financiación de 250 millones de dólares, tendrá que acelerar en el desarrollo de su propio servicio si no quiere ser superado por OpenAI.

Un buscador en pruebas

De momento, los proyectos de buscador inteligente han acabado rompiéndose al encontrar los límites de los modelos de lenguaje actuales. Google desplegó de forma caótica su AI Overviews, una especie de resúmenes con IA generativa que acabaron mostrando la importancia de filtrar los datos que la IA usa para generar las respuestas. Estas últimas semanas, Perplexity también ha tenido que enfrentarse a la acusación de plagio de Forbes, por usar su contenido sin citarlo apropiadamente.

Sin duda, la posibilidad de usar la IA generativa con información en tiempo real es el futuro lógico de estas tecnologías. La duda es si ahora mismo el algoritmo está suficientemente desarrollado como para verificar y filtrar los resultados de búsqueda antes de elaborar las respuestas. OpenAI ha apostado por la prudencia, abriendo esta funcionalidad a un grupo reducido de usuarios. El tiempo y el ‘feedback’ dirán si el servicio está en su momento adecuado de madurez como para lanzarse al público.

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