Según el informe de la American Institute of Architects (AIA) de 2025, la relación entre los arquitectos y la inteligencia artificial es compleja, marcada tanto por la curiosidad como por la reticencia a su uso.
En el reciente informe del American Institute of Architects (AIA) revela que solo el 6% de los arquitectos utiliza regularmente herramientas de inteligencia artificial, y apenas el 8% de las empresas han integrado estas tecnologías en su flujo de trabajo. Un 20% está en proceso de implementación y un 35% considera adoptarla. Actualmente, la IA se aplica en tareas simples como la transcripción de reuniones, la redacción de propuestas y correcciones de textos. Además, se explora su uso en el diseño generativo para evaluar múltiples opciones de diseño rápidamente, aunque todavía requiere supervisión humana para garantizar la creatividad y el contexto adecuado.
La IA promete optimizar procesos rutinarios, como la detección de conflictos en modelos BIM, liberando tiempo para tareas creativas. En edificios inteligentes, la IA mejora la eficiencia energética mediante el análisis de datos para ajustar dinámicamente sistemas de iluminación y climatización. Además, contribuye al diseño sostenible, optimizando materiales y formas para reducir la huella de carbono.
La adopción de IA en este ámbito, también enfrenta grandes retos como altos costos iniciales, la necesidad de datos precisos, y la resistencia cultural dentro de la profesión. También existen preocupaciones éticas sobre la privacidad y el uso responsable de los datos, y una brecha de habilidades que limita una adopción más amplia.
Las generaciones futuras quieren implementar la IA en su profesión
Aunque el 78% de los arquitectos muestra interés en aprender sobre IA, muchos mantienen reservas sobre su impacto en la profesión. Las generaciones más jóvenes son más propensas a adoptar estas tecnologías. El informe sugiere una integración incremental, similar a la adopción del modelado BIM en el pasado.
El informe establece paralelismos con la adopción del modelado BIM, que enfrentó desafíos similares durante su introducción. También sugieren una integración incremental de la IA, comenzando con aplicaciones manejables en lugar de cambios radicales, como un enfoque más práctico para su incorporación en las prácticas arquitectónicas.
De cara al futuro, se espera que la IA juegue un papel cada vez más importante en la arquitectura. Eventos como la Conferencia de Arquitectura y Diseño AIA25 permiten explorar su potencial transformador, con talleres sobre diseño generativo, edificios inteligentes y consideraciones éticas. La arquitectura avanza hacia una integración donde la IA actúe como una herramienta complementaria a la experiencia humana, en lugar de reemplazarla.
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