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Ilya Sutskever, uno de los pilares fundacionales de OpenAI y su científico jefe hasta ahora, ha decidido dejar la compañía, marcando el final de una etapa significativa para la organización que ha sido un faro de la inteligencia artificial generativa. La noticia, anunciada por Sam Altman, CEO de OpenAI, en la plataforma X, no solo cierra un capítulo para Sutskever sino que también introduce a Jakub Pachocki como su sucesor en un momento crucial para la empresa. Junto a Sutskever también abandona la compañía de ChatGPT Key Ally, según informa The Information.

 

Desde su cofundación de OpenAI, Sutskever ha sido una figura central, reconocido tanto por su brillantez intelectual como por su calidez humana, aspectos destacados por Altman en su despedida. La influencia de Sutskever en el campo de la IA ha sido profunda, contribuyendo a avances clave que han posicionado a OpenAI en la cúspide de la tecnología de IA. Su trabajo no solo ha avanzado la investigación y el desarrollo dentro de OpenAI, sino que también ha ayudado a modelar la dirección estratégica de la compañía, especialmente en lo que respecta a la seguridad y la ética en IA.

Ilya Sutskever, cofundador de OpenAI, cierra un ciclo en la compañía que ayudó a crear, dejando un legado de innovación y una nueva dirección bajo el liderazgo de Jakub Pachocki.

Durante su gestión, Sutskever no solo se enfrentó a desafíos técnicos, sino que también jugó un papel crucial en momentos decisivos para la empresa, incluido el breve derrocamiento de Altman como CEO, un evento que subraya la intensa dinámica interna de OpenAI. Este incidente, que casi fragmenta la estructura de liderazgo de OpenAI, destacó la influencia y el respeto que Sutskever comandaba dentro y fuera de la compañía.

Jakub Pachocki, quien asumirá el rol de científico jefe, ha sido una pieza clave en el equipo de investigación de OpenAI, liderando proyectos significativos como el equipo de Dota, que desarrolló sistemas de IA capaces de competir al más alto nivel en el juego Dota 2. Su promoción a científico jefe no solo es testimonio de su competencia técnica y liderazgo, sino también de la confianza que la organización deposita en él para guiar a OpenAI hacia su próxima fase de innovaciones y desafíos.

Con la salida de Sutskever, Pachocki enfrenta la tarea monumental de liderar a OpenAI en un período de intensa competencia y escrutinio público. Bajo su liderazgo, se espera que continúe el enfoque en la alineación ética y la seguridad de los sistemas de IA, áreas que han ganado importancia dado el poder y el potencial de la tecnología de IA para modelar todos los aspectos de la sociedad.

Además, el equipo de Superalineación, anteriormente bajo la supervisión de Sutskever y ahora posiblemente bajo la de Pachocki, será crucial para desarrollar formas de dirigir y regular sistemas de IA superinteligentes. Esta área de trabajo es vital para asegurar que OpenAI no solo avance en sus capacidades técnicas sino que también lo haga de manera que beneficie a toda la humanidad.

 

Intrigas y revueltas: La batalla por el poder en OpenAI

En lo que parecía un capítulo sacado de una saga épica de traiciones y alianzas, OpenAI ha vivido días de agitación interna que podrían rivalizar con los mejores guiones de ‘Juego de Tronos’. La trama se desencadena con una jugada audaz: el despido de Sam Altman, cofundador y hasta entonces CEO de OpenAI, ejecutado con una precisión que hubiese enorgullecido a los maestros estrategas de los Siete Reinos.

El levantamiento de noviembre

La crónica de esta saga comienza en la noche del 16 de noviembre de 2023, cuando Ilya Sutskever, entonces Chief Scientist y cofundador, teje en secreto un plan que sacudiría los cimientos de OpenAI. Sutskever, en un movimiento digno de Varys el Arácnido, conspira para desplazar a Altman, proponiendo a Mira Murati, CTO de la empresa, como su sucesora. La conjura se materializa al día siguiente en una videollamada donde Altman es despojado de su cargo, un momento que marca el inicio de un torbellino político y empresarial.

La decisión de destituir a Altman no solo provocó una avalancha de reacciones dentro de la empresa, sino que también desató la ira de gigantes como Microsoft, liderado por Satya Nadella, cuyo enfado refleja el de un lord traicionado en sus propios dominios. La noticia del despido, publicada con un comunicado que cuestionaba la sinceridad de Altman, agitó las aguas de Silicon Valley y más allá.

La contrarrevolución y el retorno del Rey

Lo que siguió fue una serie de movimientos rápidos y frenéticos, reminiscentes de las rápidas alianzas y traiciones de ‘Juego de Tronos’. Altman, en un acto que recuerda a Daenerys Targaryen buscando reclamar su derecho al trono, no tarda en encontrar apoyo en Microsoft, donde rápidamente le ofrecen un nuevo rol, mientras que en OpenAI, las fichas empiezan a moverse para su retorno.

El campo de batalla se extiende más allá de las oficinas de OpenAI. Greg Brockman, también cofundador y presidente, dimite en solidaridad con Altman, mientras que un grupo de investigadores senior también abandonan la compañía. La presión de los inversores y la comunidad más amplia de IA, incluido un notable grupo de empleados que amenazan con renunciar, finalmente inclina la balanza. Como en un giro inesperado en ‘Juego de Tronos’, el consejo de administración de OpenAI se ve obligado a reconsiderar su decisión.

El desenlace

Después de días de negociaciones tensas y debates, la historia alcanza su clímax cuando OpenAI anuncia que Sam Altman será reinstalado como CEO. Este regreso, celebrado por muchos dentro y fuera de la empresa, es un momento de reunificación y fortalecimiento de alianzas, prometiendo un nuevo capítulo de estabilidad y crecimiento para OpenAI.

Este episodio, con sus giros y vueltas dramáticas, no solo revela las complejidades del poder en las altas esferas de la tecnología sino que también subraya la fragilidad de las estructuras de liderazgo en el vertiginoso mundo de la inteligencia artificial. La saga de Altman y Sutskever, con su tenso interludio de poder, desilusión y eventual redención, seguirá siendo un caso de estudio sobre la dinámica de poder, la lealtad y la estrategia en la era digital.

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