El acuerdo entre Prisa, Le Monde y ChatGPT fue un gran golpe de efecto para el periodismo global. Tras la denuncia del ‘New York Times’ contra OpenAI, a quien acusa de entrenar su modelo de lenguaje con artículos de su periódico sin pagar, OpenAI ha movido ficha. Seguramente, este movimiento se debe al auge de la IA generativa como negocio y a la necesidad de continuar entrenando su modelo con textos de buena calidad.
Pero, ¿qué dudas plantea este pionero acuerdo?
¿Cómo se van a integrar los contenidos en ChatGPT?
Según comentó OpenAI en el comunicado, los usuarios de ChatGPT podrán comenzar a interactuar directamente con la información de estas cabeceras. Los contenidos se integrarán en forma de resúmenes que responderán a las preguntas de los usuarios.
La idea es que los contenidos vayan siempre citados, algo similar a lo que ya ocurre en Copilot, de Microsoft, o en Perplexity. Así, los usuarios podrán acceder a la fuente de la información y, si lo desean, ampliar los detalles de su consulta.
¿Tendrá sentido pagar una suscripción a ‘El País’ pudiendo acceder a sus noticias desde ChatGPT?
Por lo que ha trascendido, ChatGPT incluirá los enlaces a las publicaciones, aunque todavía es pronto para hacer balance y dependerá en cualquier caso del uso que hagan los usuarios de la herramienta. Aquí la clave está en si los usuarios necesitarán clicar en el enlace o con tan solo realizar una nueva consulta obtendrán más resultados directamente en la plataforma.
Se desconocen los términos económicos del acuerdo, aunque algunas fuentes lo tasarían entre uno y cinco millones de dólares. Según fuentes de Prisa, esta alianza permite asegurar unos ingresos regulares para sus cabeceras principales.
¿Cobrarán royalties los periodistas, como ya ha anunciado ‘Le Monde’?
De momento, Prisa no ha dado este paso ni ha anunciado una compensación económica para los autores de la información. En Francia, el periódico ‘Le Monde’ sí distribuirá parte de los beneficios entre los periodistas. Posiblemente esta decisión se produzca para evitar conflictos laborales en un país habitualmente movilizado.
Todo ello se enmarca en un momento en el que se están produciendo tensiones en la industria del entretenimiento por la incorporación de la IA. Como explica Albert Cañigueral en una entrevista en Paréntesis: «Los trabajadores ya se han organizado en Hollywood para tener capacidad de decisión en cómo se incorpora la IA en el proceso creativo».
¿Se podrá conversar con la IA y que esta te responda con la voz de los locutores de la Cadena Ser?
Aunque nos gustaría conversar sobre la actualidad con Francino o Aimar Bretos, de momento esta posibilidad no ha sido confirmada por ninguna de las partes. De hecho, Cadena Ser no se ha incluido en el acuerdo inicial, en el que sí que están ‘El País’, ‘Cinco Días’, ‘As’ y ‘El Huffpost’.
Monos Estocásticos comentaban en un episodio reciente la posibilidad de que algunas respuestas de ChatGPT fueran directamente clickbait, en alusión al estilo desenfadado que tiene el Huffpost: «Qué peligroso, preguntarle algo a ChatGPT y que te responda ‘no te vas a creer esto’».
¿Se integrarán más medios de comunicación con otras ideologías?
La idea inicial de Open AI era llegar a un acuerdo con cabeceras de diferentes países y de variedad ideológica. Sin embargo, algunos usuarios se han quejado de que haya elegido a Prisa como cabecera principal para su despliegue de estas funcionalidades. Cabe resaltar que, por el momento, ‘El País’ es el medio generalista que más suscriptores de pago tiene en España, 350.000.
Si atendemos a visitantes únicos mensuales, la cabecera de Prisa se vería superada por ‘El Español’. De nuevo, el objetivo de este acuerdo no es otro que entrenar el modelo con información de calidad.
¿Puede haber conflicto de interés?
Otra de las dudas es si este acuerdo podría tener incidencia en las decisiones editoriales de la compañía. ‘Le monde’ ha salido del paso diciendo que el contrato se circunscribe únicamente a la cesión de los contenidos y no afectará a la imparcialidad de los mismos. Sin embargo, la credibilidad de estas cabeceras podría quedar tocada por esta dependencia económica a un gigante como OpenAI. Como siempre, Monos Estocásticos lanzan su reflexión: «No sé si los medios están metiendo el zorro en el gallinero».