La filtración no afecta a datos bancarios, según fuentes de la compañía
El pasado 7 de mayo, Iberdrola sufrió un ciberataque que expuso la información de 600.000 clientes en España. La compañía eléctrica informó rápidamente a las autoridades y lo notificó a los afectados a través de una carta. Los datos comprometidos incluyen nombres, apellidos y DNI, pero no información bancaria ni direcciones.
Según un portavoz de Iberdrola, el incidente se detectó rápidamente y se tomaron medidas inmediatas para mitigar el impacto. Además, se ha reforzado la seguridad de los sistemas para evitar futuros ataques. La compañía insiste en que los datos expuestos no son sensibles y que la privacidad de sus clientes sigue siendo una prioridad.
Esta filtración sucede al día siguiente de conocer que Telefónica habría sufrido un ataque similar durante el mes de marzo. En este otro ciberataque, los delincuentes habrían obtenido nombres, direcciones de correo electrónico y números de teléfono de los clientes. Los usuarios cuyos datos hayan sido comprometidos podrían enfrentarse a riesgos de phishing, suplantación de identidad y otros tipos de fraudes, por lo que deberán estar atentos y desconfiar si se ponen en contacto con ellos.
Este ataque ha generado preocupación entre los usuarios y ha puesto de relieve la importancia de la ciberseguridad en grandes empresas. La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) está colaborando con Iberdrola para investigar el incidente y asegurar que se cumplan todas las normativas de protección de datos.
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