Elon Musk ha anunciado que su startup xAI hará de Grok, su chatbot competidor de ChatGPT, un proyecto de código abierto. Esta decisión, que sigue a una demanda contra OpenAI por alejarse de su misión original de beneficiar a la humanidad, promete democratizar el acceso a la tecnología de IA y acelerar la innovación en el campo.
Grok, descrito como un chatbot en búsqueda de la verdad, ha sido hasta ahora exclusivo para los suscriptores Premium de la plataforma X. Sin embargo, Musk ha decidido liberar el código completo de Grok, permitiendo que cualquiera lo use o modifique. Esta estrategia contrasta marcadamente con la de OpenAI, que, aunque ofrece una versión de ChatGPT y el modelo de lenguaje detrás de él para su uso gratuito, mantiene su código privado.
La decisión de Musk no solo desafía el enfoque de OpenAI, sino que también se alinea con la postura de Meta sobre el acceso a la IA, añadiendo una nueva opción a la creciente comunidad de IA generativa de código abierto. A pesar de ser más nuevo y pequeño, la liberación de Grok al dominio público podría acelerar la innovación y las mejoras en la IA a través de la colaboración comunitaria.
Este cambio de rumbo refleja las críticas de Musk a la gobernanza corporativa en la IA, reflejadas en sus propias experiencias con Tesla y el reciente tumulto que involucra al CEO de OpenAI, Sam Altman. Al abrir Grok, Musk no solo cumple con su visión de una IA abierta y accesible, sino que también desafía el statu quo, promoviendo un modelo donde la transparencia y la colaboración puedan llevar a avances significativos en la tecnología.
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