Anthropic ha lanzado Claude 3.5 Sonnet, una nueva versión de su modelo de lenguaje que mejora considerablemente en la mayoría de indicadores. Este movimiento deja a OpenAI y Google atrás en casi todos los benchmarks, excepto en matemáticas. En este ámbito, GPT-4o continúa llevando la delantera. Este adelantamiento es más doloroso si tenemos en cuenta que los fundadores de Claude son exmiembros de OpenAI.
Esta nueva versión llega en un momento de intensa competencia en el sector, donde empresas como Anthropic, OpenAI y Google están constantemente innovando para mejorar sus modelos. La mejora sustancial en el rendimiento de Claude, especialmente en tareas de programación, refleja el enfoque de Anthropic en desarrollar IA más versátil.
Artifacts
Además, han incluido una nueva función, Artifacts, una ventana que se abre cuando le pedimos que programe código, cree documentos de texto o diseñe una página web.
Precisamente esta nueva versión promete un rendimiento más que óptimo en programación, aspecto en el que desbanca claramente a todos sus competidores. En este ámbito, Claude 3.5 Sonnet puede escribir, editar y ejecutar código de forma independiente, mostrando un razonamiento avanzado y habilidades sofisticadas para resolver problemas. Además, es especialmente hábil en la traducción de código entre diferentes lenguajes de programación, lo que lo hace ideal para actualizar aplicaciones antiguas y modernizar sistemas existentes.
Este avance promete hacer más eficiente y accesible el desarrollo de software en el futuro, marcando un hito importante en la evolución de la inteligencia artificial y su aplicación en el mundo de la programación.
Benchmarks de Claude 3.5 Sonnet
Semana complicada para Open AI
La compañía de Sam Altman ha visto como las novedades en el ámbito de la generación de vídeo, con el lanzamiento de Kling, Dream Machine y las promesas de Runway, dejaban a Sora en un segundo plano. Ahora, además, se le suma este ataque directo a la línea de flotación de la empresa: ChatGPT.
A todo lo anterior se le deben añadir también las voces discordantes que, dentro y fuera de la empresa, llevan semanas cuestionando el liderazgo de Altman. Y sin duda la de Ilya Sutskever es la más potente, por lo que ha significado para su empresa su salida y por el inesperado movimiento: esta semana se han conocido los planes del cofundador de OpenAI para impulsar su nueva empresa, Safe Superintelligence, para promover la regulación en el terreno de la IA generativa.
Toda revolución necesita sus cronistas. Suscríbete a nuestra newsletter y ponte al día en tecnología, IA y medios de comunicación.
