En el CES 2024, celebrado en Las Vegas, los fabricantes de PC y microchips, enfrentando el desafío de motivar a los consumidores a reemplazar sus computadoras portátiles de la era de la pandemia, han presentado una nueva característica clave: la inteligencia artificial. Empresas líderes como Advanced Micro Devices (AMD), Intel y Dell Technologies están incorporando «unidades de procesamiento neuronal» (NPU) en los últimos diseños de chips, con la esperanza de alentar a los consumidores a invertir en portátiles de gama alta, según publica Reuters.
Sam Burd, presidente del negocio de PC de Dell Technologies, destacó la importancia de preparar los PCs para las futuras capacidades de la IA, lo que podría ayudar a competir con gigantes como Apple. Las NPU, diseñadas para lograr un alto rendimiento en funciones de IA con necesidades de energía modestas, podrían ser un factor decisivo en la elección de los consumidores. Aunque actualmente hay pocas aplicaciones que aprovechen al máximo estas capacidades, se espera que más estén en desarrollo, según David McAfee de AMD.
En el CES 2024, los grandes de la tecnología como AMD, Intel y Dell presentan innovaciones en IA para revitalizar el mercado de PCs.
Intel organizó una «casa abierta» en el CES donde varios fabricantes de PC, incluidos Dell y Lenovo, mostraron sus últimas laptops con demostraciones que destacaban las nuevas capacidades de IA. Un portátil de Dell presentado en el evento incluía una tecla de IA, la primera adición a un teclado de Windows en décadas, que activa el software de IA generativa de Microsoft, ayudando en aplicaciones y respondiendo preguntas complejas.
Sin embargo, actualmente esta función se basa en la nube y presenta cierta latencia en la ejecución de tareas. Burd señaló que integrar estos motores directamente en el PC podría resultar en una mayor rapidez y menor latencia. Aunque para lograr esto, se necesitarán máquinas mucho más potentes que las actuales, incluso con los chips de IA avanzados.
En el corto plazo, los PCs con chips de IA avanzados se enfocarán en el segmento premium, con precios que oscilarán entre 800 y 1.200 dólares. Esta estrategia podría ser clave para reavivar las ventas en un mercado que ha visto una disminución en la demanda post-pandemia.
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