Arabia Saudí, conocida por sus vastos yacimientos petrolíferos y sus recientes inversiones en el mundo del deporte, ahora pone su mira en la tecnología de inteligencia artificial (IA) con un ambicioso plan de inversión. El reino ha preparado un fondo de 40.000 millones de dólares destinado a convertirse en una superpotencia en el ámbito de la IA, utilizando sus riquezas petroleras para financiar este objetivo.
El fondo saudí, según informa The New York Times, se centrará en startups y desarrollos tecnológicos emergentes, con el objetivo de impulsar el crecimiento bajo su capital. Esta iniciativa posicionará al fondo como uno de los más grandes a nivel global dedicados exclusivamente a la inversión en inteligencia artificial.
No es la primera vez que Arabia Saudí se vincula con el desarrollo tecnológico. Silicon Valley ha sido testigo de significativas inversiones saudíes en los últimos años. Incluso Elon Musk buscó financiación saudí para privatizar Tesla. OpenAI, conocida por su desarrollo de modelos de IA como ChatGPT, también ha explorado financiación en Oriente Medio para desarrollar sus propios chips y reducir su dependencia de NVIDIA.
El reino busca convertirse en líder mundial en tecnología de IA, diversificando sus ingresos más allá del petróleo y mejorando su imagen internacional.
El Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí está colaborando con importantes firmas de capital de riesgo estadounidenses, como Andreessen Horowitz (a16z), fundada por Marc Andreessen y Ben Horowitz. Existe la posibilidad de que a16z abra una oficina en Riad, lo que subraya la seriedad de la apuesta saudí por la IA.
La estrategia de inversión saudí no solo busca impulsar startups y el desarrollo de modelos de IA, sino también fomentar la fabricación de chips especializados y la creación de centros de datos y empresas públicas dedicadas a la IA. Esta inversión masiva busca diversificar los ingresos del país más allá del petróleo y aumentar su influencia geopolítica.
A pesar de los ambiciosos planes de inversión, Arabia Saudí enfrenta críticas por su historial en derechos humanos, incluyendo la opresión de mujeres y minorías religiosas, el asesinato de disidentes políticos y la financiación del terrorismo. La inversión en tecnología de IA se ve como un intento de mejorar la imagen del país a nivel internacional.
Con el lanzamiento de este fondo previsto para la segunda mitad de este año, Arabia Saudí se prepara para jugar un papel crucial en el futuro de la inteligencia artificial. La magnitud de la inversión y la colaboración con firmas de capital de riesgo de renombre indican que el reino está seriamente comprometido con liderar la innovación en IA a nivel mundial.
Este movimiento de Arabia Saudí hacia la tecnología de IA refleja una tendencia creciente de países y regiones que buscan establecerse como líderes en el campo emergente de la inteligencia artificial, reconociendo su potencial para transformar la economía global y la sociedad en general.
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