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La IA avanza, y con ella, cambian los hábitos de consumo de información en la red. Àlex Hinojo, uno de los pioneros de Wikipedia en Catalunya, la Viquipèdia, reflexiona sobre el futuro de las plataformas colaborativas y el papel de la IA en la sociedad digital.

Àlex Hinojo Sánchez (Barcelona, 1980) es un director de proyectos culturales, activista por el conocimiento libre y uno de los primeros “viquipedistas” en Catalunya. Diplomado en Ciencias Empresariales por la Universitat de Barcelona y la Universitat Oberta de Catalunya, Hinojo ha sido clave en la expansión de la Viquipèdia catalana y en la promoción de la cultura en entornos digitales, desempeñando el cargo de director de proyectos y luego director general de Amical Wikimedia. Hoy en día, se dedica a iniciativas de derechos digitales, con una especial preocupación por la transparencia y ética en la IA.

– Viendo cómo evolucionan los motores de IA, afirmas que ves complejo el futuro de proyectos como Wikipedia. ¿A qué se debe?

—Los usuarios en Internet consumimos contenido sin preocuparnos demasiado por la autoría. Memes, vídeos de TikTok o artículos de Wikipedia se consumen sin valorar la gran cantidad de trabajo detrás. Con los buscadores basados en IA, no necesitamos ir a la fuente: ya puedes pedirle a la IA que resuma lo que ha pasado hoy o que explique la Revolución Francesa en tono divulgativo. Es una forma rápida y atractiva de informarse.

– ¿No crees que la IA, de hecho, hace que Wikipedia sea más necesaria que nunca como fuente de referencia?

—Que sea necesaria no significa que sea relevante. Mira los periodistas: son más necesarios que nunca, pero cada vez tienen menos impacto. La Wikipedia es un gran proyecto porque es transparente y trazable. Puedes ver todo el historial de un artículo y las fuentes que lo respaldan, algo que los proyectos de IA aún no ofrecen. Pero la mayoría de la gente no valora o no necesita esta transparencia; no se cuestiona la información. El reto es hacer que las IA sean más transparentes y auditables.

– ¿Cuál de los avances en IA te hace pensar que Wikipedia será cada vez menos relevante?

—Wikipedia se hizo popular porque estaba muy bien posicionada en Google. Pero la gente lee menos y se informa por otros canales. Será menos popular, aunque eso no significa que no sea necesaria. De una fuente generalista pasará a ser una fuente de “resistencia”, un lugar donde acudir para verificar información. Pero si no tenemos lectores, nos será difícil tener voluntarios, algo parecido a lo que ocurre en los medios de comunicación. Sin lectores, no hay anunciantes; es un círculo vicioso.

– ¿No crees que los viquipedistas podrían integrar herramientas de IA en vez de verlas como competencia?

—Ya llevamos años usando IA en Wikipedia, como para patrullar vandalismos o hacer pretraducciones de artículos. Cada versión idiomática adapta la tecnología según sus necesidades. Eso no es un problema.

– Entonces, ¿cuál es el problema con la IA y Wikipedia?

—No es un problema simple; es multifactorial. Hace años que Internet dejó de ser un espacio colaborativo y pasó a ser el Internet del influencer, donde el beneficio es personal y no colectivo. Esto nos afecta como sociedad. El individuo vive en sociedad, pero parece que, si no monetizas, no eres nadie. Yo hago cosas en Internet porque me gusta, no para ganar dinero. La IA puede ser un camino hacia la ilustración o hacia la idiotez, igual que Wikipedia. El problema no es la tecnología; somos nosotros, los humanos.

– ¿Ves la pérdida de popularidad de Wikipedia como un problema? ¿Crees que las IA ofrecerán respuestas a la altura?

—No es ningún problema. Al contrario, Wikipedia es un ejemplo de lo que se puede lograr si colaboramos. La IA es opaca, controlada por corporaciones que no siempre tienen intenciones claras. Si esta tecnología se hiciera con datos abiertos y fuera auditable y pública, podría ser revolucionaria. Es una cuestión de decidir qué modelo de tecnología queremos.

– ¿Cuáles son los sesgos de la IA que te preocupan más?

—Nos cuesta ver nuestros propios sesgos. Además, está el riesgo de la citogénesis, cuando la IA se queda sin datos de base y empieza a usar contenidos artificiales, generados por otras IA o por ella misma. Necesitamos archivistas, documentalistas y expertos en gestión de información.

«El problema no es la tecnología; somos nosotros, los humanos»

– En las escuelas, ¿consideras lógico prohibir o ignorar el uso de IA, mientras que se permite el uso de Google y Wikipedia para tareas escolares?

—Depende de la tarea. Lo que queremos es que los niños aprendan a pensar. La escuela se adapta al cambio demográfico y tecnológico como puede, y no entro a valorar cómo gestiona cada maestro su aula.

– ¿Qué sentimiento hay en la comunidad de Wikipedia respecto a la IA? ¿Miedo, rechazo, aceptación?

—¿Y en el periodismo? No hay una opinión compartida. Cada uno tiene su postura, y supongo que depende del día.

 

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