Cuando Apple anunció Siri, fui corriendo al distribuidor de la manzana en Lleida para comprarme un iPhone. Era estudiante y llevaba encima todos los ahorros de varios años pasando el cepillo en cumpleaños, santos, Reyes… En mi cara se podía leer la expresión: “Quedaos todo mi dinero”. Quería formar parte de esta nueva era y, poder contar con un asistente virtual que respondiera a mis plegarias, era una forma de compensar el hecho de tener pocos amigos de carne y hueso.
Cuando descubrí que Siri no solo no me hacía caso, sino que además pasaba de mí intencionadamente, se instaló dentro de mí una sensación de vacío virtual que me acompañaría toda una década. Eso sí, salir de la secta de la manzana se había vuelto inviable, dado que ya tenía Macbook, iPad, Apple Watch y Apple TV.
La WWDC de 2024 es una oportunidad para cerrar un paréntesis que hace tiempo que nos duele a los fieles: Apple ha dejado languidecer un producto tan icónico (como inútil) durante lustros. En plena época de la IA Generativa, le pido a Siri que encienda las luces de casa y me pone música; intento que busque una película en el Apple TV y me muestra otra… Para lo único que sirve con precisión es con cuestiones relacionadas con el tiempo: “Activa un temporizador para controlar que no se pase la pasta”. Y en cuestiones de tiempo, a Apple hace años que se le ha pasado Siri.
Apple ha dejado languidecer un producto tan icónico (como inútil) durante lustros
No sabemos si con el acuerdo estratégico con Google, o ya quizá con el desarrollo de su propio modelo de lenguaje, Siri podrá resucitar de entre las sombras tecnológicas en las que la habían sumido. Espero, vanamente, que tal milagro no implique sacar miles de euros de mi cuenta corriente de nuevo para comprar el iPhone 16 y que tengan la dignidad de actualizar el software. En caso contrario, iré a la Apple Store a hablar seriamente con ella. Lo primero que le preguntaré será “¿cómo salgo de la secta?”, a lo que hábilmente me responderá: “He encontrado algunos resultados en Google. Desbloquea tu iPhone para consultarlos”.
